Es uno de los balnearios más económicos sobre la Costa Atlántica, pero su principal atractivo para las familias es que cuenta con un gran parque acuático, inspirado en leyendas de naufragios, tesoros y piratas. Tres barcos piratas encallados en una piscina de quinientos mil litros, rampa mojada de quince metros de alto, tobganes de todos los tamaños y cañones lanza agua, forman parte de sus atracciones.
Es posible alojarse en camping, cabañas, casas de alquiler y hoteles. Las opciones gastronómicas también son diversas, predominando los sabores fronterizos. La escapada se puede combinar con propuestas culturales como la visita a la Fortaleza de Santa Teresa o el Fuerte San Miguel, muy próximos o con jornadas de compras, en la zona de Chuy.
Destino: Barra de Chuy, Rocha
Duración: un día